Los 3 Enemigos de tus Metas
- Fabiola Quiñones

- 25 ago 2017
- 3 Min. de lectura
Estadísticamente un 90% de los emprendedores desisten de sus proyectos antes de los 4 años. Una cifra que realmente asusta, ¿cómo puede ser posible que un 90% de los emprendedores no continúen el camino hacia sus metas?, ¿Cuáles son las razones que ocasionan esto?
Sabemos que emprender no es una tarea sencilla, pues involucra tener disciplina, motivación, persistencia, pasión, esfuerzo, etc. El camino contiene muchas subidas y bajadas, días de grandes satisfacciones y otros de grandes aprendizajes.
El problema surge cuando nos quedamos en una de esas bajadas, y renunciamos a cumplir nuestras metas.
Juan Sebastián Celis Maya experto en desarrollo personal, habla de enemigos que nos hacen desistir de nuestras metas, definiéndolos como todos aquellos elementos que se pueden interponer en nuestro camino, que nos impiden avanzar antes de llegar, los que buscan desestabilizarnos cuando no vemos avances en nuestros proyectos.
Existen 3 enemigos que en cualquier momento pueden interponerse en nuestro camino:
El primero de ellos es el MIEDO

El miedo a lo desconocido, a lo que pasará, el miedo a perderlo todo, el miedo a no saber qué hacer si todo falla o el mismo miedo al éxito.
Como lo he mencionado en artículos anteriores el miedo es algo que solo existe en nuestra mente, y que trata de paralizarnos en cualquier momento, no tenemos que sentirlo porque es irreal; pero lo creemos tan cierto que dejamos que nos absorba y consuma nuestros sueños.
El mejor consejo que existe para derribar este enemigo es: Actuar a pesar de sentir miedo.
El segundo enemigo es la PROCRASTINACIÓN:

La cual es la acción o hábito de retrasar las cosas, “creer que mañana es el mejor momento para realizar algo, o tal vez el mes que viene o el año que viene” la procrastinación viene acompañada del primer enemigo y de la pereza.
Estoy segura de que muchos hemos pasado por ella, y hemos retrasado grandes proyectos, Piers Steel un investigador en la Universidad de Calgary quien ha estudiado este fenómeno, dice que curiosamente las cosas que queremos que se lleven a cabo mejor y a las que más importancia otorgamos son las que más frecuentemente demoramos.
Y el consejo para afrontar a este enemigo es: desarrollar el hábito de la auto-disciplina.
El tercer enemigo es la DEPRESIÓN:

De acuerdo con Mental Health America la depresión, es una enfermedad grave y común que nos afecta física y mentalmente en nuestro modo de sentir y de pensar. Nos puede provocar deseos de alejarnos de nuestra familia, amigos, trabajo, y escuela, causarnos ansiedad, pérdida del sueño, del apetito, y falta de interés o placer en realizar diferentes actividades.
Cuando tenemos metas por cumplir y estamos en esas subidas y bajadas, puede aparecer este enemigo, justo cuando sentimos que no avanzamos y no obtenemos los resultados deseados, la depresión nos roba el total interés de seguir caminando, nos sumerge en un sueño profundo de tristeza y no nos deja ver más allá, cerrando las puertas ante nuevas oportunidades.
Este fenómeno puede afectar a muchos emprendedores y también puede venir del resultado de tener a los enemigos anteriores: el miedo y la procrastinación.
Afortunadamente la depresión es una enfermedad tratable y el mejor consejo que existe para este enemigo es: buscar ayuda profesional y tratar de animarte a ti mismo, dando pasos en la vida con la fe y la certeza de que todo volverá a estar bien.
Tratar de enfrentar a estos enemigos puede ser difícil, pero al hacerlo te darás cuenta que la felicidad, el entusiasmo, la pasión e inspiración vuelven a aparecer en tu vida, para continuar con más fuerzas sacando adelante tus metas.
Y Por último quiero compartirte el siguiente poema, el cual está lleno de reflexión:
Yo tuve un enemigo que mis pasos seguía,
y aunque parezca extraño yo no lo conocía,
mis planes y mis metas todas desbarataba,
mis mejores deseos por él no los lograba,
un día pude encontrarlo y reclamé su cinismo,
le destapé la cara y me encontré a mí mismo,
desde ese día todo se transformó,
pues aquel enemigo mi amigo se volvió,
mi antiguo subconsciente que antes interfería,
después me ayudaba y mis deseos cumplía,
una vez que mis planes a él yo le confiaba,
casi sin darme cuenta el solo los lograba,
convencía a la gente, confianza me dio,
logro oportunidades que ya no malogró,
hoy estamos de acuerdo y conocí la verdad,
todo es fácil y nada hay que no pueda lograr,
puedo ayudar a otros y no temo al destino,
pues soy solo yo quien marca mi camino,
ahora que ya no existe conflicto entre los dos,
puedo llegar a todo, inclusive hasta Dios.
Anónimo













Comentarios